Iglesia de los Capuchinos. Viena |
Desde su fundación, esta cripta es la sepultura de los cuerpos embalsamados de 142 personas reales y aristócratas, además de unas urnas que guardan los corazones o restos incinerados de otros cuatro , incluyendo 12 emperadores y 19 emperatrices.
Francisco José I fue el último emperador enterrado en este lugar, al lado de su esposa Sisi y de su hijo Rodolfo.
También es la última morada de 12 niños: 4 hijos del emperador Fernando III y 8 hijos de Leopoldo I.
En 1989, Zita, la última emperatriz austríaca fue enterrada aquí y en 2011 su hijo mayor Otto de Habsburgo, al igual que su esposa Regina, fueron sepultados en este recinto.
Al morir poco después, la primera piedra no se puso hasta el 8 de septiembre de 1622, con el emperador Fernando II, pero, las distintas vicisitudes ocasionadas por la guerra de los 30 años, no permitió que fuese consagrada hasta el 25 de julio de 1632.
En 1740, la emperatriz Mª Teresa amplió la cripta hacia el jardín del monasterio dotándola de una cúpula abovedada, obra del arquitecto Jean Jadot de Ville-Issey.
Foto: Rolf Süßbrich |
Como, debido al paso del tiempo, el monasterio estaba deteriorado, el emperador Fernando I lo derribó y lo reconstruyó, en 1840.
En 1960, al no estar las tumbas en buen estado, se pusieron medidas para conservar los sarcófagos, por tanto, Kart Schwanzer construyó una bóveda nueva, con puertas metálicas del escultor Rudolf Hoflegner.
Se seleccionaron las tumbas, agrupadas por cargos palaciegos y eclesiásticos, para ser trasladadas a la nueva bóveda.
Hasta el año 1700, el material más utilizado para los sarcófagos fue una aleación semejante al bronce, cubierta de laca. Más tarde se usó una mezcla de cobre y bronce, por ser más ligero y también la plata.
En 2003 se hizo un acceso para los minusválidos, abriendo puertas no usadas y facilitando la visita a la cripta, siguiendo el orden cronológico de la historia
Mediante el aire acondicionado, se previene de un nuevo deterioro de las tumbas, para que los visitantes puedan observar, emocionados, el lugar donde los Habsburgo duermen el sueño eterno.
Visita a la Cripta Imperial (Kapuzinergruft) en Viena
- La cripta se encuentra en la Iglsia de los Capuchinos, Tegetthoffstraße 2, 1010, Viena,
junto a Neuer Markt
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